La mujer, quien se dedica a préstamos bancarios, estaba con su mamá jugando en el casino “Lucky Eagle” en Rochester, Washington, y nunca imaginó que su apuesta de 100 dólares se convertiría en una millonaria cantidad. ero tan pronto se anunció la supuesta cifra ganadora en la máquina, uno de los miembros del casino se le acercó y le dijo que era un error de la computadora.
Un empleado del casino inmediatamente apagó la máquina y declaró que todo había sido un error debido a un mal funcionamiento de la computadora. “Apagaron todo, se la llevaron (la máquina), imprimieron un recibo y me dieron 80 dólares”, relata Castillo