La bolsa contenía tapones para oídos y deliciosos dulces.
Como todo en la vida, hay situaciones que se comprenden, otras que se respetan, y unas que se toleran. Dentro de estas últimas está el llanto de un bebé durante algún viaje. Pero si eres el que está sentado a su lado, te verás fuertemente comprometido a no desesperarte.

Y por más que quieras concentrarte en tu playlist o una lectura, llegará un momento en que te sientas tan incómodo, que desearás aterrizar lo más pronto posible. Si te sientes identificado, la acción de estos padres te alegrará el día.

Conscientes de que Lorenza, su pequeña hija de un año, podría sentirse irritable o asustada durante el vuelo, prepararon una bolsita con dulces y le agregaron un par de tapones para los oídos, en caso de que se le ocurriera ofrecer un concierto en el viaje a Cancún.

“Al momento de abordar se me acerco un señor con una bebé, me obsequio estos dulces, y también a todos los pasajeros alrededor de él, después de leer la tarjeta que traía, morí de amor”, contó Pao Reyes, la usuaria que compartió la imagen en Facebook que ha sido aplaudida por miles de usuarios.