Historias de abuso, corrupción e incapacidad en filas de las policías municipales del Estado de México, se cuentan por decenas, (salvo algunas excepciones) Atizapán de Zaragoza, Naucalpan y Tultitlán son los principales municipios donde el abuso de poder policiaco, falta de protocolos, desconocimiento de la ley, -solo saben lo básico del reglamento de transito y muchas veces desconocen los bandos municipales- por supuesto es común que tengan el encubrimiento de jefes inmediatos que igual que ellos gozan de los beneficios económicos que generan sus subalternos.

En Atizapán de Zaragoza municipio gobernado por Ana Balderas (quien busca reelección) es común ver en los diferentes puntos de las avenidas principales a moto-patrulleros al acecho de automovilistas, incluso es común ver en este municipio operativos montados por policías municipales acompañados de una o dos policías de transito deteniendo al azar a automovilistas y motociclistas, pero no crea usted que son remitidos al corralón, (muy pocas veces sucede) tal vez a usted le ha pasado, normalmente con sobornos que van desde los 50 pesos hasta elevadas sumas de dinero, las oficiales de transito municipal apoyadas por elementos masculinos llegan a acuerdos economicos con infractores y son liberados en el mismo lugar en donde son detenidos, pero querido lector no le encantaría a usted, que en horas pico, estuvieran esos mismo oficiales dando vialidad sobre Bulevar Ignacio Zaragoza o en avenida San Mateo, o en Avenida de los Maestros? pero eso solo sucede en un universo alterno que hasta el momento, no conocemos.

En Naucalpan de Juárez, municipio gobernado por Edgar Olvera que ahora busca ser diputado local es común ver sobre el propio periférico a elementos de transito -montados en poderosas motocicletas- a la caza de automovilistas, sin importarles que sea una avenida de alta velocidad y que a demás su jurisdicción no contemple esa zona, detienen a automovilistas, los hacen estacionarse sobre el propio periférico y con toda la calma del mundo comienza a negociar…”Joven buenos días, sabe por que lo detuve?”…por supuesto la respuesta que pasa por la mente del automovilista no la puede decir…y solo atina a contestar “no oficial, dígame”…ahí comienza todo, las historias de automovilistas que incluso son llevados a bordo de patrullas rumbo a cajeros automáticos con la finalidad de sacar dinero para el soborno, no se repiten una sino decenas de veces.

En el municipio mexiquense de Tultitlán la historia de los policías municipales y de transito es incluso más negra que en los dos anteriores, ahí el actual alcalde Adán Barrón -dicen ha solapado a mas no poder, no se sabe si por interés económico o por miedo- el actuar delincuencia de sus elementos policiacos.

Apenas en esta semana que acaba -entre otras muchas- se dio cuenta en Tultitlán de un condenable suceso, dos jovencitas descansaban después de salir a volantear -repartir publicidad comercial- cuando de pronto fueron detenidas por policías municipales y trasladadas a las galeras municipales -cárcel local- de Tultitlán lugar en el que pasarón más de 24 horas incomunicadas y sin alimento, Yelitza Albani Vargas Martínez e Isabel Hipólito Nava, amigas y compañeras de trabajo en la empresa Fanal ubicada sobre la avenida López Portillo, vivieron las horas mas angustiantes de su vida.

Las amigas fueron subidas por la fuerza a la patrulla y sin pasarlas por el Juez calificador, fueron remitidas directamente a las galeras, incomunicadas y sin leerles sus derechos después de 24 horas aisladas, un elemento policiaco se acerco a ellas, proponiéndole a Yaritza que saliera con él y de esa manera podrían ser libres, como era de esperarse la jovencita se negó y exigió comunicarse con un familiar, lo cual le fue negado, hasta el momento, la información con la que contamos al día de hoy es relacionada con la liberación de este par de jovencitas que su único delito fue trabajar repartiendo publicidad en este negro municipio, de acuerdo a versiones cercanas, se afirma que emprenderán las acciones legales correspondientes por los delitos de privación ilegal de la libertad, entre otros.