Un taxi volador conceptual es la última creación conjunta de la casa de Gaydon. Podría ser una realidad en 2020.
Por José Virgilio Ordaz (@Neckriagen).
Aston Martin no sólo ha renovado casi toda su gama en tiempos recientes, pues nos presentó hace unos meses un submarino codesarrollado con el especialista Triton, además que ya había presentado una lancha denominada AM37S con 530 HP.
Al parecer no están contentos con sus conquistas en tierra y agua, por lo que ahora ponen sus ojos en el cielo. Su último concepto, denominado Volante Vision Concept, es un avión personal en cuyo desarrollo han participado la Universidad de Cranfield, Cranfield Aerospace Solutions y la división aeroespacial de Rolls-Royce, que ya no tiene relación con la línea de autos más allá del nombre.
Este Aston Martin no sólo puede volar, pues agrega adelantos como hibridación y conducción autónoma para convertirse en un verdadero escaparate tecnológico. La firma indica que este desarrollo obedece al crecimiento de las urbes, con el consecuente congestionamiento vial que eso provoca, con traslados de mínimo una hora, limitados por los tipos de transporte disponibles.
“Tenemos una oportunidad única de crear un concepto de lujo en aviones que representarán la fusión definitiva del arte y la tecnología. Hemos utilizado formas y proporciones que expresan la misma devoción por el diseño, la ingeniería y la belleza que dan forma a nuestros automóviles”, indicó Marek Reichman, supervisor del diseño del concepto.
El Volante Vision, definido como un “taxi híbrido” de despegue y aterrizaje vertical, tiene capacidad para tres pasajeros, un alcance de 800 km y una velocidad máxima de 402 km/h, vía un motor con dos turbinas de asistencia eléctrica y tres hélices, las dos del frente con la capacidad de pivotear para darle mayor sustentabilidad y poder despegar incluso desde el patio de su casa, aunque hay hermetismo sobre detalles técnicos específicos tanto del tren motriz como del avión en general.
Al reducir los tiempos de traslado, se puede vivir incluso fuera de la ciudad, evitando no sólo la saturación vial, sino la visual, auditiva y de espacio vital que se sufre en las grandes aglomeraciones. Por supuesta, esta es una solución apenas teórica, aunque de todos modos, de volverse realidad, no será una que esté disponible al alcance de todos, aunque bueno, de eso se trata el lujo.
Aston Martin define al equipo de desarrollo como un “equipo de ensueño”, que nace con la idea de “brindar a sus clientes una nueva dimensión de libertad”. Esto parece describir en cierta forma al hiperdeportivo Valkyrie, en cuya planeación estuvieron inmiscuidos nombres como Red Bull F1, Rimac, Cosworth, Ricardo, Alcon and Surface, Multimatic, Bosch o Wipac.
Quien sabe, quizá si, como en otras ocasiones, los suficientes potentados dejan un cheque en blanco en las oficinas de Aston Martin, este vehículo volador también llegue a ser una realidad, lo que la firma de Gaydon estima que podría suceder en 2020.