La emprendedora Liv Conlon abandonó sus estudios a los 16 años porque sufría acoso escolar, montó un negocio inmobiliario y ahora su empresa factura más de un millón de libras anuales —alrededor de 1,30 millones de dólares—, según relató al diario británico Daily Mail.
Hoy en día, esta joven de Bothwell (Escocia, Reino Unido) tiene 20 años, pero no olvida que lo pasó mal durante su adolescencia: “Siempre fui la mejor de la clase, así que supongo que la gente se sentía amenazada” y “no caía bien“.
Tras padecer abusos durante cuatro años, dejó el colegio un año antes de graduarse a pesar de obtener excelentes calificaciones. “Siempre quería irme cuando me encontraba en el colegio” y los profesores le dijeron que estaba “loca” por no terminar esa etapa académica ni estudiar una carrera universitaria.
Conlon ideó su negocio después de amueblar una vivienda que su madre, también emprendedora, llevaba meses sin vender. Tras decorar su interior, la operación se cerró en tres días por un precio mayor al solicitado y el vendedor pagó dinero extra por los objetos añadidos.
A pesar de sus miedos iniciales, comenzó su aventura empresarial sin gran capital inicial ni experiencia significativa en un sector “en gran parte dominado por hombres”, cuando ella era “una chica rubia con el pelo largo y rizado que, en realidad, aparentaba 16 años”.
Entonces, promocionó en línea su iniciativa y explicó que las personas podían desprenderse de sus viviendas a un precio más alto si estaban bien decoradas. El primer año, su empresa ThePropertyStagers ganó 30.000 libras —cerca de 38.750 dólares), pero después subió como la espuma.
Ahora, esta empresaria posee un equipo compuesto por 10 personas —entre los que se encuentran su madre y su hermano—, amuebla más de 300 viviendas al año y reinvierte sus beneficios en el negocio. A cambio, trabaja 18 horas diarias y casi todos los días de la semana para continuar su expansión.
A menudo, Liv Conlon participa en programas de televisión y de radio y con la intención de “inspirar a los jóvenes a iniciar negocios y ser emprendedores”. De hecho, a esta mujer le encantaría enseñar a los padres y a los profesores de los colegios que “hay otras opciones además de ir a la universidad”, como “tener éxito al iniciar un negocio a una edad temprana”.
Si te ha gustado, ¡compártelo con tus amigos!
