La compañía Google indicó que tras la petición de los reguladores alemanes, dejó de escuchar y transcribir las conversaciones de los usuarios con su asistente personal.

Alemania indicó que el Asistente de Google fue usado por empleados de la compañía para evaluar las grabaciones acústicas con el fin de optimizar el sistema. Sin embargo, durante el proceso de evaluación, los empleados del buscador tuvieron acceso a conversaciones personales e información confidencial.

“Estas revisiones ayudan a que los sistemas de reconocimiento de voz incluyan más acentos y dialectos diferentes en todos los idiomas. No asociamos clips de audio con cuentas de usuario durante el proceso de revisión, y solo realizamos revisiones para algunos clips”, explicó un portavoz de Google a The Verge.

De acuerdo con el portal Tech Crunch, la autoridad de protección de datos de Hamburgo, le mencionó a Google su intención de utilizar el Artículo 66 del Reglamento General de Protección de Datos (GDPR) para comenzar un “procedimiento de urgencia” debido a esta situación.

Este artículo permite la autoridad a cargo ordene el alto del procesamiento de datos si cree que existe “una necesidad urgente de actuar para proteger los derechos y libertades de los interesados”, a lo cual Google indicó que el 26 de julio ya había cesado la práctica, además de decidir suspender manualmente las revisiones de audio del Asistente de Google en toda Europa.