El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo el sábado que Cuba es un “ejemplo de resistencia” y propuso que toda la isla sea declarada patrimonio de la humanidad.
También señaló que la Organización de los Estados Americanos (OEA) debe ser reemplazada “por un organismo verdaderamente autónomo, no lacayo de nadie”.
Aunque gran parte de Cuba parece estar atascada tecnológicamente en la mitad del siglo pasado, López Obrador no aparentó hablar con ironía cuando propuso la designación de patrimonio mundial con que Naciones Unidas galardona a sitios históricos.
El presidente elogió la capacidad de Cuba para resistir la hostilidad de Estados Unidos desde 1959. López Obrador no mencionó las recientes protestas que fueron reprimidas violentamente por el gobierno cubano.
López Obrador ha manifestado antes su oposición a las sanciones estadounidenses que restringen el comercio con la isla, y se pronunció porque se ponga fin a esas medidas.
Sobre la OEA, con sede en Washington, López Obrador dijo que “no debe descartarse” la sustitución de ese organismo, que debería funcionar de manera independiente y con carácter “mediador”.
México ha manifestado públicamente sus desavenencias con los máximos responsables de la OEA por su papel en la situación política de diversos países, entre ellos Bolivia.
López Obrador emitió sus palabras durante una ceremonia a la que asistió el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba para conmemorar el 238avo natalicio de Simón Bolívar, que encabezó la lucha para liberar a diversas colonias, hoy países sudamericanos, del dominio de España a principios del siglo XIX.
El gobierno mexicano anunció hace días que enviará este domingo a Cuba dos barcos con alimentos y materiales médicos.
La Secretaría de Relaciones Exteriores de México dijo que los barcos llevarán tanques de oxígeno médico, agujas y jeringas, así como alimentos básicos como arroz y frijoles.
México hizo el anuncio el jueves, el mismo día que Estados Unidos endureció las sanciones contra algunos funcionarios cubanos por haber sofocado violentamente unas protestas callejeras que estallaron a principios de mes en la isla.
Las nuevas sanciones están dirigidas contra un funcionario cubano y una brigada especial del gobierno que Estados Unidos afirma estuvo implicada en los abusos contra los derechos humanos durante la represión del gobierno.