En todo el mundo se podrá apreciar en Noche Buena y Navidad la denominada “Luna fría” o “Luna llena de las largas noches”, la cual tendrá su máximo esplendor a las cinco horas de este viernes.

Desde hace 38 años es que en estas fechas no ha habido luna llena, la primera de invierno y de la que deriva su nombre, misma que no se repetirá hasta el 2034, por lo que especialistas de la NASA recomendaron mirar al cielo.

La razón por la que la luna llena no coincide siempre en una misma fecha es debido a la duración del movimiento de traslación de los diferentes cuerpos celestes, en el caso del plenurio o Luna llena, que es la fase cuando la Tierra está entre el Sol y el satélite, ocurre cada 29 días y medio lo que origina que haya entre 12 y 13 de éstas cada año, y como su movimiento de rotación y traslación dura lo mismo, sólo vemos una cara.

En entrevista con Notimex, el astrónomo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Alejandro Farah, detalló que el movimiento de la Tierra alrededor del Sol es de 365,2422 días al año, por lo que cada cuatro se agrega uno al calendario, “entonces cada año no se pueden repetir en los mismos días las lunas llenas, puesto que los números son fraccionarios, pero cada determinado año se repiten estas coincidencias”.

El también presidente de la Sociedad astronómica Mexicana (SAM), comentó que múltiples factores intervienen en ello, pues no se trata únicamente del movimiento de traslación del planeta hacia nuestra estrella, pues ésta también se mueve por la Via Lactea, sube y baja como un vaivén, “todo tiene que ver por la gravedad desde el centro de la galaxia, del Sol, la Tierra y la Luna; al final es como una danza cósmica perpetua”.

El académico recordó que nuestro satélite natural puede apreciarse a simple vista con binoculares y telescopio, sin que la luz que refleja lastime los ojos, aunque si es con este último aparato no debe excederse de un minuto para descansar la vista.

Con información de Notimex.