Habitantes de San Lucas de esta localidad denunciaron que viven confinados en un ambiente; de marginación, extrema pobreza y carencia de servicios desde hace 30 años.

Tras la revocación del triunfo del PRI, por el Tribunal Federal Electoral (TRIFE), luego que el candidato del Partido Revolucionario Institucional violó el Código electoral para el Estado de México al usar símbolos religiosos en el pasado proceso del 7 de junio, llegaron funcionarios estatales con la promesa de cambiar la imagen y situación de pobreza del municipio, argumentaron.  

A pesar que a principios de año llegaron distintas secretarias del gobierno del estado de México con la promesa de atender el rezago social de 30 años que tiene Chiautla; con programas de entrega de despensas, apoyos a mujeres, adultos mayores, electrificación, alumbrado público, pavimentación de vialidades, infinidad de recursos, pero San Lucas sigue en el abandono.

Esta zona permanece en el abandono de las autoridades locales y estatales, pues existen viviendas con techos de lámina, que tienen pisos de tierra, uso de letrinas, baños improvisados, falta del sistema de drenaje, sin pavimentación y banquetas, pero las autoridades emanadas del PRI, “con una despensa pretenden subsanar la extrema pobreza en que vivimos”.

En este municipio existen comunidades, como San Lucas que registran un alto grado de marginación, extrema pobreza y abandono de las autoridades municipales y estatales, indicaron que voltearon la cara a este municipio, pues el PRI no quiere perder el gobierno que controla “Una familia de caciques”.

A pesar, comentaron que la elección extraordinaria atrajo la atención del gobierno de Eruviel Ávila Villegas, no fue para subsanar la marginación en que vivimos, sino para intentar convencer a la gente con servicios y acciones de votar por el PRI, aun cuando las comunidades de Chiautla tienen un rezago social de 30 años.

“Y no queremos que nos den una despensa o mil pesos cada dos meses, demandamos empleo, con un salario digno que nos permita vivir de manera decorosa, no queremos vivir de las dádivas del gobierno y comer de su mano”.

“Exigimos que se realicen los servicios urbanos, pero no bajo la condicionante de votar por el PRI, y mucho menos que no induzcan a votar por la familia millonaria de Gonzalo Bojórquez”.

“Esta familia se enriqueció, de la marginación del pueblo, confinaron a los pobres a vivir en condiciones deplorables e infrahumanas, sin servicios básicos, agua, drenaje, electrificación, alumbrado, y ni se diga de la seguridad”.

Pero, “ahora pretenden convencer a los pobladores que en este gobierno sí vamos a vivir bien, es una mentira vil, como todas las argucias que hemos recibido durante 30 años, este domingo la gente debe recordar cómo vivimos los últimos años en caminos de terracería, sin transporte, en una palabra bien jodidos, por la familia Bojórquez”.