La Dirección de Cultura de Metepec y la Casa de Cultura de San Jerónimo Chicahualco “Enrique Bátiz Campbell” se vistieron de gala para recibir la exhibición de esculturas de barro titulada “Historia de la Familia Rivera Soteno”, la cual forma parte de la cuarta generación dedicada a la fabricación de productos artesanales y artísticos en barro, en Metepec.
Por parte de la familia Rivera Soteno, tanto de abuelos maternos como paternos, los integrantes heredaron este oficio; sin embargo fue particularmente de parte de la familia Soteno que se destacaron los más reconocidos artesanos y artistas en barro de este Pueblo Mágico.
Mientras que de parte de la familia Rivera, su taller se encuentra en la calle Lerdo de Tejada número 212 en el Barrio de Coaxustenco, es importante destacar la importancia de este taller, ya que fue uno de los primeros talleres dedicados a la fabricación de ollas y cazuelas que le dieron fama al municipio de Metepec como cuna de artesanos del barro.
La historia inicia con dos familias; Modesta Fernández Mata que fue una de las creadoras del árbol de la vida y Darío Soteno, que apoyó ésta producción. Por otra parte, Guadalupe Rivera y Gila Carrillo se dedicaron a la realización de ollas y cazuelas. Posteriormente, Isidro Rivera, hijo de Guadalupe Rivera contrajo nupcias con Carmen Soteno, cuya abuelita, Modesta Fernández fue creadora de figuritas y silbatos de barro. Por ello, al nacer sus hijos, cuatro mujeres y dos hombres, les transmiten su sabiduría en cuanto a la escultura en barro. En la actualidad, la descendencia de los Rivera Soteno se dedica a realizar trabajos decorativos y de restauración.
Los dos varones Rivera Soteno, Benito y Tomás incursionaron en especialidades enfocadas al arte y la escultura. Por una parte, Tomás estudió la Licenciatura en Artes Plásticas mientras que Benito ahondó en la cerámica en alta temperatura. Las mujeres Rivera Soteno, Rosa, Francisca, Lucía Guadalupe y Clara se especializaron en el pintado y decorado de los productos. Cabe destacar que la nieta de Carmen e Isidro, Carmen Lucía, participó en concursos a la edad de 16 años y recibió distinciones en el área.
En su momento, el matrimonio Rivera Soteno generó el modelado de figuras decorativas y creó aportaciones importantes en la representación del Árbol de la Vida, entre las que destacan la imagen de Dios Padre, San Jorge y el Dragón y el Vidriado Tradicional aplicado a las figuras decorativas.
Durante la exhibición, los visitantes podrán apreciar árboles de la vida policromáticos, monocromáticos, así como también alebrijes de colores pastel y vivos que Benito Rivera Soteno e Isidro Rivera crearon a lo largo de sus trayectorias, tanto artísticas como artesanales.
En la historia del Árbol de la Vida, un paraje que es difícil pasar por alto es la influencia de Diego Rivera en 1943, muralista mexicano que sugirió la aplicación de color en esas figurillas monocromáticas de barro que en su conjunto, relatan historias, principalmente la de la creación divina, aunque en la actualidad, los temas de cada árbol son variados y van desde lo más cotidiano hasta lo religioso.
Una vez que la familia Rivera Soteno expandió su bagaje artesanal más allá de ollas y cazuelas, el taller creció y se adaptó a las necesidades de los escultores para crear piezas cada vez más detalladas y coloridas. Para dar la bienvenida a los visitantes de la casa de cultura, se yerguen dos árboles de la vida importantes, uno que evoca la creación y otro, a San Jorge y un dragón que fue elaborado gracias a un pedido especial basado en este pasaje.
De acuerdo con Benito Rivera, el taller familiar no solamente se dedica a la elaboración de árboles de la vida, sino que también se incluyen alebrijes y esculturas, algunas de ellas elaboradas por Tomás Rivera. “Mi hermano, al terminar sus estudios quiso interpretar nuevas formas, mismas que se presentan en esta ocasión con el título de ‘Semillas’, es en este punto en el que el cambio de lo artesanal y lo artístico se hace más visible” subrayó Benito Rivera durante el recorrido por la exposición.
“Toda la familia se ha involucrado continuamente con la artesanía, desde mi sobrina, Carmen Lucía que también participa en esta muestra con la pieza con la cual ganó un concurso, hasta mi hermano Tomás y sus esculturas que las elabora con barro de Metepec para preservar la tradición” describió Benito Rivera.
En la actualidad, Metepec se destaca en el aspecto artesanal por el uso de numerosas técnicas de escultura en barro, desde la utilización de alambres en las esculturas, hasta la pigmentación del barro, “no deja de participar en la creación de artesanías y el aspecto artesanal va de la mano con la evolución e innovación en el arte escultórico”.
La exhibición permanecerá hasta el 6 de julio del año en curso en las instalaciones de la Casa de Cultura de San Jerónimo Chicahualco.