La Comisión Estatal de Seguridad Ciudadana (CESC), asumió el control de la seguridad en los municipios de Chiautla y Chiconcuac, donde aseguró las armas de cargo de los elementos de la policía local y además se destituyeron a los directivos de seguridad pública.
La razón de dicha determinación, informó en conferencia de prensa el secretario General de Gobierno, José Manzur Quiroga, obedece al “debilitamiento de las corporaciones policíacas” y para investigar si están relacionados con delitos, además de aclarar que desde el 4 de julio se notificó a los presidentes municipales de dichas demarcaciones de las acciones que se tomarían.
La medidas se decretaron luego de que el pasado fin de semana se registró el secuestro y homicidio de José Miguel Aguirre Moreno, de 27 años de edad, hijo del ex candidato de Morena a la alcaldía de Chiautla, José Miguel Aguirre, así como el homicidio de una mujer.
Manzur Quiroga explicó que a los elementos policíacos de ambas demarcaciones se les hizo el pase de turno y se procedió al desarme.
Informó que en el municipio de Chiconcuac fue destituido el director de la policía municipal, Humberto Sánchez Dorantes y nombrado como nuevo titular Iván Villanueva Morales; en Chiautla fue depuesto Francisco Terrazas Abad y asumió el cargo Raúl Sánchez Reyes.
Respecto al desarme, indicó que ello obedece a la intención del gobierno de tomar “la huella balística” de las mismas, las cuales se irán al depósito de la Comisión Estatal de Seguridad Ciudadana, mientras que los elementos aclaró que no fueron despedidos, sino que se les citará en Toluca para capacitarles y, en su caso, ayudarles para que revaliden su examen de control de confianza.
Cuestionado respecto a las acciones adoptadas, el funcionario enfatizó que si bien se han tenido “algunos problemas” de secuestros en la región, los eventos registrados – del hijo del ex candidato de Morena y una mujer – no tienen que ver con la determinación, sino que se advirtió “poca fuerza de las policías en esta zona”, aunque ante las preguntas aceptó que al momento de las investigaciones sobre los hechos antes señalados se vio “poca colaboración policiaca”.
De acuerdo con lo expuesto en la conferencia de prensa, en Chiautla había 47 elementos policíacos en funciones y en Chiconcuac 33, y que con la entrada de la CESC serán ahora 86 y 66, respectivamente. Además se dio a conocer que en la entidad mexiquense hay al menos 55 mil armas en circulación entre los cuerpos de seguridad estatal y municipales.