Policía francés golpea y se burla de una refugiada tras desmantelar su campamento.
En la grabación la mujer no puede ocultar su angustia ya que los policías le impiden volver al campamento para recoger sus pertenencias. En ese momento un agente de policía se lanza sobre la mujer espetándole “aquí mando yo”. A medida que la mujer le muestra su documentación a una mujer policía mientras llora en voz alta, otro agente se ríe de la refugiada: “No hay ni una sola lágrima en su rostro”