El artista invirtió cinco días de su vida para concluir la pintura gigantesca
Guillaume Lagros, pionero en la técnica sobre hierba, superó todas las adversidades del clima y logró uno de sus mayores objetivos: pintar un fresco de 10 mil metros cuadrados, sobre la hierba de una colina localizada en Suiza.
El artista, mejor conocido como Saype, se preocupó por la preservación de la naturaleza, de tal manera que utilizó productos naturales y biodegradables con ingredientes provenientes de sustancias naturales, agua, harina y aceite de lino, informó SDP Noticias.
Para el artista esta obra no fue fácil, por lo que la consideró como “un desafío técnico y físico. Si olvidas un bote de pintura, necesitas media hora para ir a buscarlo”. En ese mismo tenor, Saype se ocupó de los agujeros que realizaron los topos, así como de la fermentación de la pintura.