El movimiento bautizado como Centenario de Vergüenza, en el que se convocó a una manifestación a las afueras de las instalaciones del América, fracasó en su intento por reclamar las decisiones de la directiva, principalmente la continuidad del técnico Ignacio Ambriz.
Debido al amago por esta congregación, el equipo adelantó su entrenamiento para evitar algún tipo de disturbio que afectara a los jugadores y cuerpo técnico, sin embargo la medida terminó por ser innecesaria.
Pasaban las 10:00 de la mañana, hora en la que se había citado a los inconformes seguidores, y ninguno de ellos había aparecido afuera del campamento azulcrema.
Ante el llamado, dos patrullas arribaron al lugar, pero sin que ningún desorden alterara el orden en el seno azulcrema. Fue mucho tiempo después que aparecieron los primeros aficionados, pero no dejaban der ser más medios de comunicación que asistentes a la manifestación.
Esto de regalar boletos para callarnos es una falta de respeto #FueraAmbriz #FueraPeláez #CentenariodeVergüenza”, decía la única pancarta que apareció en las inmediaciones del Club América.
Al final, un total de siete personas se animaron a gritar “Fuera Ambriz, fuera Ambríz”, pero el aliento se les terminó y el ruido pareció ser insuficiente para representar a quienes no están contentos con el accionar de su equipo.
Fuente: El Universal