La Oficina en Colombia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos manifestó este viernes su “preocupación” por el aumento de la violencia contra líderes comunitarios y defensores de derechos humanos, que ha dejado 52 muertos en 2016.
“Al 30 de noviembre de este año, la Oficina monitoreó con varias fuentes en terreno 35 atentados y 52 homicidios en contra de líderes y lideresas defensoras de derechos humanos. Cinco casos más de homicidios se encuentran aún bajo nuestro análisis”, indicó en un comunicado, advirtiendo sobre un incremento de la delincuencia en lugares que estaban bajo control de la guerrilla FARC.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), principal y más antigua guerrilla del país, sellaron el 24 de noviembre un acuerdo de paz con el gobierno de Juan Manuel Santos para poner fin a más de medio siglo de conflicto armado.
Según la ONU, “13 de los 57 homicidios fueron cometidos” desde la firma el 26 de septiembre del pacto original con las FARC, que fue revisado por las partes para incluir propuestas de la oposición tras haber sido rechazado en un plebiscito.