Con la muerte de José Juan Díaz, quien falleció al caerle una columna de acero en el distribuidor vial Alfredo del Mazo, sus hermanas y familiares afrontarán una complicada realidad, tener que alimentar, vestir y educar a sus tres hijos ante la negligencia de la constructora responsable.
Esto debido a que la empresa responsable de realizar los trabajos de la obra que tiene uno de los mayores retrasos en la entidad no se ha hecho responsable ni ha entablado conversación para realizar la indemnización que garantice la manutención de sus descendientes, aseguró María Eugenia, hermana del occiso.
Su familia, que como muchas del Estado de México vive casi al día y quienes son originarios de la comunidad San Mateo Otzacatipan, han tenido que juntar y pedir dinero prestado para cubrir los gastos funerarios, además, vecinos realizan donaciones para poder sepultarlo este miércoles.
La hermana relató que el hombre, de 41 años de edad, era ayudante en un taller de aluminio y vidrio, y que a pesar de que ganaba poco, solventaba los gastos para sacar adelante a Sararí, Diego y Alán, de 17, 13 y 9 años respectivamente, quienes no asimilan la muerte de su padre.
“Comentó que iba a salir y regresaba para convivir en la casa viendo películas en la tarde, somos unidos y nos apoyamos, pedimos la indemnización, educación para los sobrinos, servicio médico y pensión, no hemos tenido ningún tipo de apoyo ni acercamiento, nada”, indicó.
Hasta el momento la negligencia de la firma Jaguar es evidente, no ha tenido ningún tipo de acercamiento con los deudos a pesar de que directivos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes aseguraron ante medios de comunicación que habría apoyo e indemnización a la familia.
“Sí, ha sido difícil con los gastos, no queremos que sus pequeños queden desamparados”, dijo mientras relataba que fue hasta la mañana del lunes cuando fueron notificados de la muerte de su hermano, ya que no contestaba el teléfono, cosa que nunca hacía; este día será velado.
Los familiares temen que sea uno de los muchos casos que permanecen impunes ante la complicidad de las autoridades, dijo que se trató de un error humano que le costó la vida al hombre, ahora sólo queda la reparación del daño a pesar de que la vida de José Juan no la recuperarán con nada.