Robots en el servicio de habitaciones, puertas que se abren con reconocimiento facial y luces que se ajustan a las peticiones de los huéspedes a través de la voz. Así es FlyZoo, el hotel del futuro que en China ya ha comenzado a funcionar, promovido por el gigante tecnológico Alibaba.
“Gracias a las tecnologías avanzadas del Grupo Alibaba todo el hotel está cubierto por el sistema de reconocimiento facial y también con inteligencia artificial que mejora la estancia de los huéspedes”, cuenta a Efe una portavoz del hotel en un recorrido por el edificio.
Desde la recepción queda claro que aquello no es un hotel normal. Una enorme pared pantalla da la bienvenida a los huéspedes que pueden hacer el registro a través de una aplicación en sus propios teléfonos móviles o a través de unos mostradores con pantallas inteligentes.
Todo sin recepcionistas, ni esperas. El rostro del huésped queda registrado nada más entrar, gracias a la cámara (del móvil o del mostrador) y será su llave para funciones como abrir la puerta de la habitación o utilizar el ascensor.
FlyZoo utiliza las fotos tomadas en el check-in para verificar que los usuarios que se alojen en el hotel puedan también utilizar áreas comunes como el gimnasio o un salón futurista equipado con pantalla y suelo inteligente e interactivo para poder realizar ejercicios a medida.
Una vez dentro de la habitación, un asistente inteligente, el Tmall Genie que ha desarrollado la compañía (similar a Alexa, el asistente de la estadounidense Amazon), da la bienvenida a los huéspedes y les ofrece detalles de comodidad como ajustar la temperatura, las luces, las cortinas o la televisión.
Además, éste ayuda a responder preguntas relacionadas con el hotel como “¿cuál es la contraseña del wifi?” o a reproducir una música determinada. Además, si el huésped necesita tomar o comer algo o si le falta algún producto de higiene no tiene más que pedírselo al asistente.
A continuación, entran en funcionamiento las estrellas de los pasillos: los robots que recorren el hotel, suben y bajan en el ascensor hasta llegar al cuarto del huésped que necesita un cepillo de dientes.
El hotel, que cuenta con 290 habitaciones y está ubicado en la ciudad de Hangzhou, muy cerca de donde el Grupo Alibaba tiene su principal sede, está operado por unos cien trabajadores.
Su precio oscila entre los 88 y los 340 dólares por habitación, aunque Alibaba no lo ha abierto tanto para engordar sus ingresos sino para mostrar las posibilidades existentes en el sector hostelero.
Redacción–noticias/elsalvador.com