El presidente Enrique Peña Nieto aseveró que es momento de actuar con responsabilidad y de mantenerse firme, pues ahí están los avances y resultados, “los quieran ver o no”.
Destacó el crecimiento del empleo “como nunca antes”, así como la tasa de inflación más baja, que permite un mejor rendimiento del gasto y la disminución de las tarifas eléctricas en comparación con hace cuatro años, que en 99 por ciento de los hogares es de casi 10 por ciento menos en términos reales.
Señaló que el gobierno, con el apoyo de distintos partidos, ha impulsado las transformaciones que México necesitaba y que por más de 12 años no se lograron hacer. Hoy ahí están las reformas, que ya se han procesado y ahora se viene aplicando.
En ese sentido, el mandatario expresó que el gobierno federal seguirá avanzando en esa ruta de armonía, orden, con una mejor estructura y la aplicación de las reformas que están dando y darán más beneficios a mexicanos, porque al romper las barreras y los frenos que impedían el crecimiento, les permitirán progresar.
Entre estas enlistó la reforma educativa, que cambiará el perfil de la educación del país, con mayor calidad, maestros mejor preparados, mejores contenidos y una infraestructura educativa adecuada.
Esa reforma también ha permitido recuperar la rectoría del Estado en la educación, y aunque procesarla e instrumentarla es un reto que no se impone, se está cumpliendo y acatando conforme lo que mandata ley, dijo.
Sobre los cambios en telecomunicaciones resaltó que permiten que haya más competencia, que bajen las tarifas, exista un mayor número de usuarios de Internet y más opciones de contratación, así como la entrada al aire de la tercera cadena de televisión abierta.
La reforma energética, por su parte, permite al país contar con una plataforma de producción propia pese a la caída en los precios del petróleo y el agotamiento de los grandes yacimientos, que obliga a explorar en aguas profundas, lo cual es más caro.
Estos son solamente algunos resultados de una gestión de gobierno que ha sido positiva en muchos aspectos, “se quieran ver o no”, reiteró el mandatario.
Durante la entrevista, Peña Nieto se refirió a la volatilidad del peso frente al dólar, que precisó se ha registrado por tres factores principalmente: la caída de los precios del petróleo a nivel mundial, la cercanía de las elecciones presidenciales en Estados Unidos y la incertidumbre sobre una eventual subida en la tasa de interés en ese país, que este día la Reserva Federal decidió mantener sin cambios.
Las economías emergentes, como México, están respondiendo a factores externos, con devaluaciones a sus monedas de 60 a 70 por ciento frente al dólar, mencionó el jefe del Ejecutivo federal.
En cuanto a la visita del candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Peña Nieto dijo que su objetivo fue y es buscar espacios de diálogo, para lo cual “tenderé puentes de plata” y dejará a un lado los posicionamientos agresivos o estridentes.
El mundo está expectante de los resultados de esos comicios y a México le afecta más por su grado de cercanía e íntima relación económica, seguridad, migratoria y comercial con Estados Unidos, anotó.
Pero como presidente de la República, subrayó que estará atento y actuará conforme a su responsabilidad de velar por los intereses de México.
La invitación fue para ambos candidatos, el republicano Donald Trump y la demócrata Hillary Clinton; lo sorprendente es que uno aceptó y decidió viajar a territorio mexicano, dijo.
“Quizá nos apresuramos y nos faltó ponderar la reacción social que se iba a presentar en México, pero me sostengo en que fue una decisión acertada y en la dirección correcta”, subrayó.
“No me arrepiento de haberlo hecho así, fue una buena decisión y seguiré en esa ruta, porque cualquiera puede ser presidente”, tanto Clinton como Trump, y nuestro país requiere que ambos conozcan bien a México, añadió el Ejecutivo federal.