Tu larga búsqueda del Punto G se acaba de volver fácil: no existe un punto específico que funcione como botón mágico para el placer femenino.
De hecho es una zona erógena grande que engloba distintos órganos, según un estudio italiano.
Los investigadores le llaman el “complejo clitouretrovaginal” (CUV, por sus siglas en inglés), un término que incluye el frente de la pared vaginal, la uretra, glándulas parauretrales, y las raíces “interiores” del clítoris.
Estimular esta región no solamente le provoca mucho placer –también puede ayudar a provocarle orgasmos vaginales, los cuales los investigadores describen como más experiencias más largos y que los sienten en todo el cuerpo.
“Encontramos mediante un ultrasonido que la masturbación externa del clítoris activa la circulación de sangre solo en el clítoris”, comenta la doctora Emmanuele Jannini, autora del estudio. “Pero la estimulación interna durante la penetración puede activar la circulación sanguínea en toda la estructura de la CUV”.
En vez de enfocar toda tu atención en un pequeño punto, solo asegúrate de apuntar a la pared frontal de su vagina. La posición del Perrito o la de Vaquerita son dos de las mejores para ayudarte a alcanzar esa área, sin embargo varía dependiendo de cada mujer, explica la doctora Jannini.
También puedes usar tus manos. Penetrarla con uno o dos dedos, con la palma hacia arriba y hacer un movimiento como si le estuvieras diciendo “ven acá” puede estimular esa región, señala la doctora Jannini. Los vibradores diseñados para estimular el Punto G puede funcionar para algunas mujeres.