Su verdugo la partió en dos y la metió en bolsas negras
Desde la aparición de la “Degolladora” de Chimalhuacán en septiembre de 2015, el municipio no había vuelto a sentir tanto miedo de andar por las calles.
Y es que la inseguridad ha rebasado los límites. Tan solo en los últimos tres meses se registraron cinco feminicidios, secuestros, asaltos y violaciones.
Los vecinos de Alfareros, Fundidores, Lomas de Buenavista y Xochitenco comentan que el aumento en la inseguridad tiene nombre y apellido: Rosalba Pineda, presidenta municipal de Chimalhuacán.
Para algunos es la “Loba” en persona, haciendo referencia a Guadalupe Buendía Torres “La Loba” -principal fraccionadora clandestina y cacique de Chimalhuacán durante varios lustros-, y que hoy están en la cárcel acusada de la muerte de 10 personas durante una batalla campaña por el control territorial.
Habitantes de este municipio al oriente del Estado de México –uno de los bastiones de Antorcha Campesina- señalan a Letra Roja que durante los días de “pánico” por la “Degolladora”, “sabíamos a qué nos enfrentábamos, sabíamos que era una mujer de la que nos teníamos que cuidar, pero ahora, son secuestros, feminicidios, robo a mano armada, pandillas, drogadictos etc, ya no sabe uno de qué cuidarse”.
Tan solo el pasado sábado, se reportó la muerte de un joven al interior de su vivienda en la calle Jacarandas. El muchacho tenía varias quemaduras en el cuerpo. El 19 de abril pasado fue encontrada la quinta mujer asesinada en los últimos meses. Su verdugo la partió en dos y la metió en bolsas negras, para abandonarla en el camino a Las Mina en la colonia Lomas de Buena vista.
Las muertes se dan en el marco de los primeros 100 días de gobierno de Rosalba Pineda, quien pese a los crímenes y a la exigencia social continúa al frente en la administración.
Vecinos del municipio comentaron a Letra Roja que la alcaldesa mandó a hacer miles de panfletos en los que calumnia y agrede verbalmente a los líderes que la cuestionan.
Ante esto, los entrevistados señalan que Chimalhuacán se ha convertido en municipio del terror, ya que aumentaron los feminicidios, ejecuciones,“tienditas” de venta de droga y los interminables abusos policíacos.
“El verdadero problema de Chimalhuacán es el populismo de Antorcha y eso se puede ver desde hace dos presidentes, todos antorchistas apoyados por su gremio”, señala Mario López.
A esta situación se le suma el llamado de auxilio que ha hecho el sector de transporte de carga quien desde hace meses ha sufrido el acoso de bandas de delincuentes que secuestran y matan a choferes de mudanza en el oriente del Estado de México.
