94% de los establecimientos en la Ciudad de México suspendieron actividades hasta conseguir la certificación exigida por la Profepa
A partir de que la Profepa exigiera a los verificentros una certificación de calibración de las pesas en los dinamómetros, 94% de los establecimientos en la Ciudad de México decidieron suspender su servicio hasta conseguir dicho documento para evitar sanciones, sin embargo esta medida ha afectado a decenas de automovilistas.
“Este es el quinto verificentro que visito y ahora que encuentro uno me dicen que debo hacer cita”, indicó Daniel Pérez en un centro de verificación de Las Águilas.
“Desde el viernes he perdido la mitad de mis días buscando dónde verificar (…) aquí ya me van a atender pero que regrese a las 16:30 horas”, lamentó Salvador Ruiz en un establecimiento ubicado en Merced Gómez cuando eran las 12:30 horas.
Por su parte, el titular de la Profepa, Guillermo Haro responsabilizó a las autoridades capitalinas del cierre de los centros de verificación: “los gobiernos locales tienen la obligación de revisar el correcto funcionamiento y apertura de todos los verificentros (…) No existe ningún impedimento legal para que algunos verificentros, fundamentalmente en la Ciudad de México, hayan decidido tomar la determinación de no abrir su servicio al público”, informó Reforma.
