Tenía solo 28 años. El 22 de enero de 2008, el actor australiano Heath Ledger estaba tirado, casi sin respirar en su departamento de Soho en Nueva York, así lo encontraron su ama de llaves, Teresa Solomon, y su masajista, Diana Wolozin, a los pocos minutos, dejó de respirar por completo.

Por meses se especuló sobre la muerte del actor, quien estaba por estrenarse como el Guasón, un villano emblemático en la nueva película de Batman, ahora, ocho años después, Kim Ledger, padre del actor, aseguró al Daily Mail Australia que en la muerte de su hijo no hay más responsables que el mismo Heath Ledger, quien combinaba medicamentos con drogas aún bajo advertencia.

“Fue su culpa absolutamente. No hubo nadie más. Él llegó a ellos. Él los puso en su sistema. No puedes culpar a nadie más en esa situación. Eso es duro de aceptar, porque lo amaba tanto y estaba muy orgulloso de él”, dijo el empresario Kim Ledger. Añadió que la hermana de Heath era una de esas personas que más lo aconsejaban y ella misma fue quien le advirtió de los riesgos de tomar al mismo tiempo sus píldoras para dormir con otras drogas para reducir el dolor y opiáceos.

Según relata el padre, la hermana hablo por teléfono con Heath una noche antes de su muerte, entre su conversación, ella le recalcó que no tomara esas sustancias y él le respondió que él sabía lo que hacía. Estos resultados fueron encontrados en la autopsia realizada al actor, donde había restos de diazepam, oxicodona, hidrocodona y doxilamina, los cuales tomaba el actor para soportar las presiones a las que estaba sometido por su trabajo en la actuación.