El ombudsman del sureño estado mexicano de Oaxaca, Arturo Peimbert, afirmó hoy que de acuerdo con testimonios, la Policía Federal tomó control del hospital e impidió que se atendiera la población tras la protesta de Nochixtlán del 19 de junio, que se saldó con varios muertos y centenares de heridos.
Un comunicado del grupo parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN) informó que la comisión busca esclarecer, entre otros hechos, si hubo o no participación deliberada de niños, si se violentaron derechos de comunicadores y si se registraron detenciones arbitrarias por parte de la autoridad y bajo qué cargos ocurrieron.
El ombudsman, que se reunió con legisladores en el pleno de la Comisión de Seguimiento al caso Noxchitlán, agregó que durante el enfrentamiento un grupo de niños fue seguido por la policía hasta una zona habitacional, por lo que huyeron y se resguardaron en un poblado vecino.
De acuerdo con los testimonios, sintieron que su vida estaba “puesta en riesgo”, explicó.
La Comisión Nacional de Seguridad (CNS) emitió un comunicado en respuesta donde rechazó esta afirmaciones.
“En ningún momento la Policía Federal atentó contra menor de edad alguno, ni puso en riesgo su vida”, dijo en referencia a las palabras del ombudsman de que agentes agredieron con gases lacrimógenos a más de 30 niños de Nochixtlán.
