Denunció a su pareja en 2 ocasiones, pero fue privada de la vida

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La joven de 24 años fue encontrada asesinada el 24 de agosto; hasta 2016 se emitió una orden contra su concubino.

Julieta Paola Suaste Hurtado denunció dos veces a su concubino por golpizas y maltrato psicológico, pese a ello, la mujer de 24 años fue encontrado sin vida en un predio de Tláhuac el 24 de agosto.

Estudiante y vendedora de zapatos por catálogo, Julieta es recordada por sus conocidos como noble, trabajadora y paciente madre de dos menores de 5 y 3 años.

De acuerdo con lo asentado en las averiguaciones previas FIZP/IZP-8/T1/1999/15-08 y FTH/TLH-1//T2/1144/15-08, la joven denunció dos veces a su concubino, Sergio Mauricio.

En una de ellas mostró golpes y un collarín, sin embargo, su pareja jamás fue investigada ni hubo medidas precautorias para protegerla por parte de la Procuraduría General de Justicia capitalina, acusó el padre de la víctima, José Luis, quien añade: “fue muy permisiva con su pareja, por eso dejamos claro que queremos justicia y se le investigue”.

La joven fue vista por última vez el 15 de agosto cuando salió de fiesta con sus amigas, muy cerca de su domicilio en Iztapalapa, de hecho, los testimonios indican que Julieta regresó en la madrugada acompañada por cuatro amigas, al filo de las 4:17 horas a bordo de un taxi.

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Sin embargo, Sergio dijo a los padres de la víctima que ésta nunca regresó, aunque posteriormente se desdijo y admitió que a las 4:30 de la madrugada regresó, pero a casa de su tía; desde entonces no volvió a verla.

Peritos hallaron la chamarra que la joven usó en la fiesta en la habitación donde dormía con Sergio, además su tía afirmó que no pasó la noche con ella.

Sus amigas indican que la joven acudió a la fiesta porque tenía la intención de abandonar a Sergio, quien no quería que Julieta saliera, de hecho, al otro día iba a regresar a casa de sus padres.

Su familia no supo nada de ella los siguientes 9 días, de hecho, el Ministerio Público de Iztapalapa 8 demoró en abrir una investigación por la desaparición, pues alegaron que sólo el concubino podía denunciar.

El 24 de agosto fue hallado el cadáver de Julieta con signos de estrangulación, a principio de este año se emitió una orden de localización y presentación contra el concubino, quien abondonó a sus hijos y no ha sido ubicado desde entonces.

Con información de Reforma

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