Autoridades de la Ciudad de México detuvieron a un niño secuestrador de apenas 13 años de edad. La detención se dio en la Basílica de Guadalupe cuando pretendía cobrar un rescate. El adolescente se encontraba con un menor de 5 años, a quien entregaría a cambio de 35 mil pesos.

De acuerdo a las autoridades, el secuestro del niño se registró el martes 17 de julio en Ecatepec, Estado de México. La investigación detalla que el menor de 5 años y otra niña acudieron a un parque; sin embargo, horas más tarde, sólo regresó la menor, por lo que sus padres comenzaron la búsqueda.

Posteriormente, los familiares del niño comenzaron a recibir llamadas para pedirles 50 mil pesos de rescate.

Los secuestradores dieron la instrucción de que el intercambio de realizaría en la Basílica de Guadalupe. El dinero se dejaría en un bote de basura para que uno de los cómplices pasara por él. Posteriormente, cuando se contara con el dinero, el niño de 5 años, quien era acompañado por el adolescente, sería liberado.

Los familiares dieron aviso a las autoridades y se montó un operativo que permitió el rescate del menor; así como la captura del adolescente de 13 años y tres integrantes más de la banda.

Menores delincuentes

De acuerdo a la Comisión Interamericana de Derechos humanos, en México los criminales cuentan hasta con 30 mil niños adolescentes. Los menores son utilizados para cometer delitos como homicidio, extorsión, secuestro, tráfico de personas y narcotráfico.

La Red por los Derechos de la Infancia en México señala que desde 2007, más de 4 mil menores han sido detenidos. Las edades oscilan entre los 7 y los 18 años de edad.

Uno de los menores delincuentes más famosos de nuestro país es “El Ponchis”. El llamado “niño sicario” detenido en Morelos, en diciembre de 2010. Al momento de su captura, Edgar “N” confesó el asesinato de cuatro personas, cuyos cuerpos aparecieron desmembrados en Cuernavaca.

Con 14 años de edad, “El Ponchis” trabajaba para “El Negro”, integrante del Cártel del Pacífico Sur. Cobraba hasta 2 mil 500 dólares por asesinar a los rivales y había veces en las que cobraba en pesos mexicanos. En 2013, tras cumplir una pena de tres años, Edgar “N” salió de prisión y se envió a Estados Unidos de donde es originario.