El Consejo de Investigación Médica de India (ICMR) tumbó un controvertido experimento que buscaba traer a la vida a las víctimas de accidentes con muerte cerebral. El proyecto, conocido como ReAnima no aparece en el registro de ensayos clínicos del país, según lo informó la revista Science.
La polémica técnica fue idea del cirujano ortopédico, Himanshu Bansal, quien trabaja en el Hospital Anupam, en el estado indio de Uttarakhand. Su idea era aplicar a 20 personas con muerte cerebral ( pacientes cuyo cerebro está clínicamente muerto y no registran ninguna actividad), una serie de intervenciones con inyecciones de células madre, un cóctel de péptidos, una estimulación con láser transcraneal y otra eléctrica del nervio mediano (nervio principal que se extiende desde el cuello hasta el brazo).
Los pacientes serían rastreados entre familias con alguna persona vegetal y que no tengan inconvenientes médicos ni creencias religiosas que le impidan donar sus órganos. Los investigadores creen que su tratamiento podría “resetear” el cerebro con un proceso similar por el que atraviesan algunos anfibios que pueden regenerar una parte del cerebro después de haber sufrido un trauma grave.
El objetivo de Bansal es que las personas con muerte cerebral recobren el “estado de conciencia mínima” que les permite, por ejemplo, tener algunos reflejos como mover sus ojos para seguir objetos.