Es por eso que Letra Roja realizó un recorrido por la Línea 3 del Metro que va de Indios verdes a Universidad donde al día se transportan 122 mil pasajeros en promedio.

El jefe de la estación de Indios Verdes indicó que, en dicha línea, se utilizan cuatro carros del convoy para mujeres y niños, pero que esta separación ocurre todo el día.

“Aquí no hay un horario específico para separar los convoys. En esta estación, todo el día se dividen los vagones para que las mujeres se sientan más seguras y prevenir el acoso sexual”.
Al preguntarle sobre si esta acción se aplicaba en todas las líneas, él comentó que no, que cada estación se maneja diferente. Pero que en la Línea 3 siempre hay policías que salvaguardan la integridad de las usuarias e impiden que los hombres se metan a estos vagones exclusivos.

Letra Roja comenzó el recorrido aproximadamente a las 7:50 horas en la estación del Metro Centro Médico rumbo a Indios Verdes, a esa hora, ya se veía a mujeres con el celular en mano, maquillándose, comiendo, pensativas, algunas durmiendo y otras más apresuradas.

Durante el recorrido, apenas vimos a dos vendedoras; una de maquillaje y pepitas que daba todo a cinco pesitos y otra más que vendía pastas y cepillos dentales para el aseo bucal.

Aproximadamente a las 8:50 llegamos a la terminal Indios Verdes y vimos como una gran cantidad de mujeres comenzaron a abordar los vagones confinados, pocas eran las que se animaban a irse en otros vagones.

En su mayoría, las mujeres que se suben a los carriles mixtos se encuentran acompañadas por parejas, amigos, llevan a sus hijos o de plano entran porque se les hizo tarde.

Féminas entrevistadas por Letra Roja indicaron que prefieren irse en el vagón de las mujeres porque se sienten más seguras que en un vagón normal, ya que es más fácil que ahí les falten al respecto.

“Los hombres son muy cochinos, te agarran las pompis y tratan de pasarse de listos con el pretexto de que se frena el Metro”, indica Sonia, de 22 años.
Otras indican que la falta de respeto entre mujeres es peor, ya que muchas se ponen a pelear en el Metro por ir sentadas o por buscar un asiento para sus hijos.

“Ya no se sabe que es mejor, si ir en el vagón de mujeres o en el de hombres; ya que las mujeres son muy ‘perras’, te arañan, te pisan, se enciman en ti, te ponen a cargar su bolsa de mano, te gritonean y algunas te pegan”, indica Lizbeth, de 24 años.
Por otro lado, una mujer de 45 años de nombre Flor se mostró muy indignada al notar que varones se subían a los carriles exclusivos de las mujeres.

“Mire, vea nomás, no se vale que los hombres se anden metiendo a los vagones exclusivos, para eso tienen casi todos los vagones, se suben y no respetan.
“Por eso les decimos las cosas no tienen valores, ni respeto. Por eso aquí les enseñamos a respetarnos”, comentó la mujer.
Al preguntarle a varios hombres cuál es su opinión sobre esta medida de prevención, algunos indicaron que estaba bien ya que tienen más privacidad y seguridad, pero muchos otros dijeron que no hay equidad de género y que cuando esto sucede las mujeres se sienten dueñas de los vagones del Metro agrediéndolos física y verbalmente.

En el Metro Hospital General no se observó a ningún policía que vigile la entrada de hombres al vagón confinado de mujeres, pero estas cuando los ven entrar, les dicen de cosas o los sacan por ellas mismas.

En Centro Médico tampoco había policías y hombres con niños prefirieron irse al vagón mixto, esto al escuchar los comentarios ofensivos que les hacen las mujeres.

“Ahorita vengo con mi hijo, tenemos cita en el Hospital General y las mujeres ni porque me ven con el niño se tientan el corazón, vengo cargado de bolsas de medicinas, estudios, la comida de mi hijo y mi hijo.
“Ellas no te ceden el asiento o no hacen el mínimo intento para que el niño pueda sentarse.
“Si te subes a sus carriles te empiezan a decir de cosas, algunas hasta preguntan si eres homosexual, humillándote por haberte subido a ‘sus vagones’”, indica Jorge C, de 45 años.
Los cuatro vagones exclusivos para mujeres se utilizan diariamente, las mujeres se sienten más seguras de ir en aquella sección.

Fuente : Letra Roja