En Atizapán y Tlalne hay bares a menos de 500 metros de centros escolares y hospitales, aunque sus leyes lo prohíben.
Pese a que en los municipios de Atizapán y Tlalnepantla está prohibida la instalación y funcionamiento de bares en las inmediaciones de centros escolares, la norma no se cumple.
En Atizapán, en el capítulo cuarto de la normativa se estipula que, en un radio de 500 metros de instancias infantiles, centros escolares, de salud o deportivos queda prohibida la instalación de sitios con venta de alcohol.
“(…) tales como cantinas, bares, billares o centros nocturnos donde se expendan o consuman bebidas alcohólicas”, se lee.
En un recorrido se observó que el restaurante-bar La Nueva Imagen opera a 60 metros del Hospital General Dr. Salvador González Herrejón, en el Bulevar Adolfo López Mateos.
A menos de 50 metros de distancia de una secundaria localizada sobre esa vía se encuentra un expendio de cervezas.
En las inmediaciones de la Universidad Tecnológica de México (Unitec) campus Atizapán, sobre Bulevar Montesol, se encuentra un mini súper y una tienda de conveniencia cuyas fachadas resaltan marcas o imágenes de bebidas alcohólicas.
Sobre Bulevar Calacoaya, se encuentra cinco establecimientos, entre bares y restaurantes, donde estudiantes señalan que pueden conseguir alcohol.
En Tlalnepantla, la prohibición también indica un radio de 500 metros, sin embargo, a menos de esa distancia, sobre Calzada Jinetes, el Primer Pizzo viola dicha disposición pues está en las cercanías del Instituto Patria y un Quick Learning.
También el Shoot Up, ubicado sobre el Bulevar Valle Dorado, que está cerca de un preescolar y el WingStop Arboledas, a lado del colegio Calli.
