Personas de la tercera edad, los infantes y los enfermos crónicos son los más afectados por los cambios climáticos, de temperatura y humedad.

Cambios bruscos de temperatura, olores irritantes que en esta época se conjuntan los contaminantes ambientales, temperatura y humedad afectan la función respiratoria habitual porque dañan tejidos sensibles, advirtió Javier Toledo Estrada, neumólogo del Hospital General de zona 20 del IMSS en Puebla.

Indicó que este tipo de cambios climáticos, temperatura y humedad, afectan principalmente a las personas de la tercera edad, los infantes y los enfermos crónicos.

También los asmáticos, pacientes con bronquitis crónica, así como aquellos con inmunidad comprometida como VIH, entre otros sienten los efectos del frío.

Javier Toledo dijo que por ello lo más recomendable es vacunarse cada año contra la influenza, la cual ya comenzó en todas las unidades de medicina familiar, así como brigadas de vacunación en las escuelas y zonas rurales.

Agregó que también se manifiestan otros virus respiratorios como es la gripa común, el rinovirus, adenovirus y rotavirus que afectan a los intestinos y las vías respiratorias, por ello es importante también que las personas lleven una alimentación sana, rica en vitaminas para incrementar las defensas.

El especialista en enfermedades respiratorias subrayó que no hay excusa para no aplicarse la vacuna, deben respetar las aplicaciones que marca la cartilla nacional de vacunación y acudir a los módulos de medicina preventiva para control de peso y talla que forman parte del programa federal “Chécate, Mídete, Muévete”.

Toledo Estrada dijo que éstas son infecciones de temporada van a comenzar a manifestarse con mayor frecuencia con la entrada del invierno.