México.- Juan Rodriguez Azpeita, radicó 21 años en Texas, formó una familia tuvo cinco hijos nacidos allá y hace nueve meses fue deportado.
El desempleo en su tierra natal lo motivo para intentar volver a la Unión Americana para emplearse una vez más en la industria de la construcción. Pero su plan le costó la vida junto a otros 10 migrantes: todos fallecieron en la caja de un tráiler hallado esta semana en San Antonio, Texas.
Juan no fue el único indocumentado del estado de Aguascalientes que viajaba en la unidad pues otros seis que sobrevivieron, cuatro de Palo Alto y dos del Municipio de Calvillo, fueron hospitalizados en San Antonio. Proveniente de una familia de albañiles, su padre Faustino Rodríguez Ibarra fue maestro y sus siete hermanos siguieron sus pasos.
De su familia, compuesta por 12 hermanos, ocho varones y cuatro mujeres, Juan Rodríguez fue el único que determinó irse a vivir a Estados Unidos. Allá, trabajó en la industria de la construcción y durante dos décadas supo burlar a la policía para no ser detenido y deportado.
En octubre del año pasado fue arrestado en compañía de otro amigo mexicano y deportado a México, dejando atrás a su esposa Patricia y sus cinco hijos.
Juan pensó regresar antes, pero la política migratoria de Donald Trump lo llenó de miedo, de acuerdo a su hermano Luis Daniel.
Entonces optó por pedirle a su mujer regresar con sus hijos a Palo Alto, de donde ella también es originaria, y marzo pasado comenzaron a asentarse.
“Juan se desesperó y decidió regresar a Estados Unidos, hace 15 días dijo me voy y partió. No supimos de él hasta que el lunes le avisaron a mi papá que había muerto en el tráiler”, señaló Luis Daniel.
Juan Rodríguez sabía cómo pasar ilegalmente, tenía años de cruzar para ver a su familia en México y volver a su vida en Texas sin ser detectado.
Ahora en la vivienda de Juan Rodríguez su familia espera el arribo del cadáver que podría tardar de dos a tres semanas, de acuerdo a las autoridades municipales.