Una joven estudiante de Nayarit fue víctima de robo de identidad, por lo que ahora debe 1,800 millones de pesos, informó la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon).
Se trata del robo “más alto del que se tenga registro” en el país, luego de que la identidad de la joven fuera robada en 2006 para posteriormente darla de alta como comerciante de destilación y venta de alcohol etílico, así como para abrir una cuenta bancaria a su nombre en la que se efectuaron depósitos millonarios.
Debido a dichas actividades, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) le fincó un adeudo fiscal a la joven nayarita superior a los 1,800 millones de pesos.
Actualmente, la Prodecon indicó que la joven ya cuenta con una sentencia definitiva de un tribunal competente en donde se reconoce la falsificación de la credencial de elector. Se le siguió el procedimiento de comprobación o revisión fiscal como no localizada, pues jamás se le ubicó en el domicilio falsamente declarado por los delincuentes.