No busque más superalimentos en sitios raros, tal vez lo que usted necesita está justo en su jardín trasero. El diente de León, tratado a veces como una hierba indeseable, ofrece muchos beneficios médicos para su salud.

La Taraxacum officinale es una especie de planta que se consume en varias formas por su riqueza en nutrientes. Por ejemplo, contiene vitaminas A, C, y K así como antioxidantes; una media taza de hojas diente de león contiene más calcio que un vaso de leche. También son ricos en potasio, lo que los hace un potente diurético y un desintoxicante de la sangre como pocos. Como purificador del organismo actúa en el hígado, riñón y vesícula.

Existen varias formas de consumir la planta que tiene un sabor semejante al de un rábano picante. Antes de hacer uso de ella, debe asegurarse de que no ha estado expuesta a pesticidas. Las tiendas de productos e importaciones asiáticas venden este producto garantizando su calidad y pureza.

La raíz se puede utilizar para hacer un té medicinal que trata problemas digestivos, cálculos, inflamación, dolor generalizado e hinchazón. Para preparar la bebida debe agregar la raíz –seca o fresca- en una taza de agua a punto de hervir; posteriormente se deja reposar de 3 a 4 minutos y se añade algún endulzante para quitar el amargor.

La raíz también puede molerse y hacerse como café en una cafetera casera. Puede acompañarse de crema y un endulzante.

También las hojas de la planta pueden usarse, y aunque son amargas, son ideales en una ensalada o adentro de un sándwich. Los pétalos no se deben tirar pues dan color y sabor a las ensaladas mixtas. En algunas zonas de Europa se prepara una mermelada de estas flores.

De tal modo que la próxima vez que las vea en su jardín, no sople sus pétalos ni las deseche; ponga a calentar un poco de agua y prepare un rico té.