México dejará de ser un país de “tránsito anónimo”, aseguró el canciller Marcelo Ebrard.

Al dar a conocer los avances de la política migratoria, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) enfatizó que México no tolerará el tráfico de personas, por lo que ya se están investigando estas redes criminales, en las cuales – dijo- están involucrados funcionarios de diversas dependencias.

“No va a haber tolerancia, conforme se vayan realizando las investigaciones se van a tomar acciones, si sabemos circuitos de protección, iremos avanzando, lo que importa es no permitirlo, es una meta esencial del gobierno mexicano”, apuntó.

El canciller también detalló en una reunión que sostuvo ayer el gobierno mexicano con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), se alertó que el número de menores no acompañados que migran hacia Estados Unidos se ha incrementado.

“Uno de los objetivos es impedir que este tráfico siga ocurriendo y no se puede negar, es la violación a los derechos humanos más grande que puede haber y ocurre en nuestro territorio”, subrayó.