Morena y aliados perfilaban pasar la aplanadora en el Senado para avalar que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) tenga el control administrativo y operativo de la Guardia Nacional.
Hasta el cierre de esta edición seguía la discusión después de más de 10 horas de debate en el Pleno del Senado, donde se buscaba ratificar en lo general la minuta de la Cámara de Diputados con el voto a favor de los senadores de Morena, y del PVEM, PT y PES. Antes, el bloque opositor había anunciado que interpondrán una acción de inconstitucionalidad ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Antes de la votación, Morena rechazó tres mociones de suspensión para darle paso urgente.
En la presentación de la iniciativa, la presidenta de la comisión de justicia del Senado, Olga Sánchez reconoció que existe un problema por la inseguridad, por lo que afirmó que la reforma a la Guardia Nacional busca encontrar claridades en la línea disciplinaria y afianzar el espíritu del cuerpo requerido.
“El presidente López Obrador es el comandante supremo de las Fuerzas Armadas, es decir, es un civil. La reforma permite superar los obstáculos administrativos que tiene la Guardia Nacional y la habilita en auxilio de la Sedena para el cumplimiento de sus misiones”, indicó la senadora morenista.
Los senadores perfilaban modificar la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, la de la Guardia Nacional, la Orgánica del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, así como la de Ascensos y Recompensas del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, en materia de Guardia Nacional y Seguridad Pública.
La también ministra en retiro afirmó que la reforma no puede ser entendida como un cheque en blanco para la Guardia Nacional y sus mandos estratégicos y operativos, por lo que aseveró que los legisladores pondrán la lupa en la Guardia Nacional para que rinda informes y cumpla con su deber, además, el titular de la corporación deberá presentarse a comparecer cuando el Senado se lo requiera.
El coordinador del PVEM en el Senado, Manuel Velasco pidió unidad para darle seguridad al país sin importar ideologías partidistas. Defendió que desde hace años las Fuerzas Armadas han brindado seguridad a la población y hacen frente a la delincuencia. “Los soldados y marinos se han ganado ese respeto a pulso, mostrando lealtad y sacrificio al pueblo de México”, afirmó.
El bloque opositor, conformado por el PRI, PAN, PRD, MC y Grupo Plural votaron en contra de la reforma, al afirmar que el gobierno busca una militarización de la seguridad en el país, ya que deja el control de una corporación policial en manos del Ejército mexicano.
El senador Germán Martínez (Grupo Plural) afirmó que lo que pretende esta reforma es que los militares tengan fuero constitucional. También el senador Emilio Álvarez Icaza (Grupo Plural) acusó que esta reforma significa un golpe militarista, mientras que el coordinador de MC, Clemente Castañeda, dijo que con la reforma se traiciona al pueblo de México al impulsar que el Ejército siga en las calles.
