n bebé murió a los siete meses de edad en Bélgica, tras recibir una dieta por parte de sus padres sin gluten y con leche de quinoa, en lugar de leche materna.
El juicio por este caso, ocurrido en 2014, ya comenzó y el juez pide 18 meses de prisión para cada progenitor, por malos cuidados del menor.
Según reporta The Independent, los padres del pequeño Lucas tenían un negocio de productos naturales y orgánicos. Cuando el bebé nació, no recibió lactancia materna, sino algunos de los productos que sus padres vendían, como bebida de avena, de arroz y de quinoa, la cual fue la que consumió durante más tiempo.