El joven fue impactado por un proyectil de gas lacrimógeno que lanzó la policía el 4 de mayo de 2006, en la toma del poblado de San Salvador Atenco.
Este viernes se realizó una movilización para exigir castigo a los responsables del asesinato del estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Ollín Alexis Benhumea Ramírez, en Atenco, Estado de México, hace 12 años.
El Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) le rindió un homenaje al joven, quien fue impactado por un proyectil de gas lacrimógeno que lanzó la policía el 4 de mayo de 2006, en la toma del poblado de San Salvador Atenco.
“Exigimos castigo a los autores intelectuales de su asesinato”, expresó Ignacio del Valle Medina, dirigente del FPDT, en la marcha que realizó un grupo de campesinos de la plaza principal de Atenco hasta la vivienda de la familia Romero, donde Alexis se refugió tras ser herido por el proyectil.
En un mitin, del que da cuenta La Jornada, recordó que Alexis acudió a Atenco junto con su padre Ángel Benhumea para solidarizarse con los atenquenses.
El estudiante, quien era miembro de la Otra Campaña, fue uno de los primeros activistas en caer herido cuando se encontraba en el acceso principal a Atenco, sobre la carretera federal Texcoco-Lechería y calle Fresnos, por lo que se refugió en una vivienda junto con otros activistas.
No pudo recibir atención médica hasta 15 horas después porque el cerco policiaco no le permitían salir ni las ambulancias podían entrar a donde se encontraba.
El joven murió el 7 de junio de 2006 en el hospital regional Adolfo López Mateos, donde había sido internado seis días antes.
Los manifestantes responsabilizaron al entonces presidente Vicente Fox, al entonces gobernador Enrique Peña Nieto, así como al ex titular de la Agencia de Seguridad Estatal mexiquense, Wilfredo Robledo Madrid.
“Ellos deberían estar en prisión. Les decimos que las muertes de Alexis y de Javier Cortés (otro joven asesinados en la represión) no deben quedar impunes”, afirmaron los manifestantes.