Las imponentes pirámides de Teotihuacán, situadas en el centro de México, cuentan a partir de hoy con un nuevo atractivo para los visitantes: un espectáculo de luz y sonido nocturno.
Teotihuacán, la llamada “Ciudad de los Dioses”, está unos 50 kilómetros al noreste de la capital mexicana y fue una de las urbes prehispánicas más importantes en México.
En sus años de esplendor (200-600 d.c) llegó a ser una ciudad de unos 20 kilómetros cuadrados con más de 100,000 habitantes, pero en los siglos siguientes fue abandonada. La pirámide del Sol, de 65 metros de altura, es uno de sus edificios más emblemáticos.
“Con este proyecto los visitantes tendrán la oportunidad de vivir una experiencia única de la historia de esta ciudad sagrada”, dijo el presidente Enrique Peña Nieto la noche del viernes al presentar el espectáculo.
Las autoridades aseguraron que la “Experiencia Nocturna en Teotihuacán” no provocará daños a las estructuras porque no será invasiva, a diferencia de un espectáculo suspendido en 2008 por daños a las pirámides.
La iluminación, con proyección de imágenes sobre la pirámide del Sol, permitirá “reconocer desde los grandes volúmenes hasta los sutiles detalles de los monumentos de Teotihuacán“, dijo el ministro de Cultura, Rafael Tovar.
El sitio arqueológico, declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco en 1987, es visitado cada año por unos tres millones de personas, de las que 700,000 son turistas extranjeros.