Se gana desde mil 500 hasta 2 mil pesos en un lugar pequeño y hasta 20 mil al día en un puesto grande
Me llevaron en motonetas a una dirección desconocida. La calle estaba llena de vecindades que de milagro están de pie. Carros con llantas de tabiques y llenos de basura. Según platican es la entrada a una de las zonas más peligrosas de Tepito -donde dicen-, hay balaceras continuamente y el que no trae pistola, no puede pelear.
Aquí se cocina de todo. Todos se conocen y se saludan. Olvidaron los nombres y los cambiaron por apodos que se acercan a su físico: el gordo, el chino, el ñango, el pelón.
Un hombre sentado en la banqueta utiliza ligas para separar los cientos de películas que tiene en una mesa de madera. Algunas todavía no salen en el cine.
El contacto lo lleva para atrás, le dice algo en voz baja y voltea de reojo. Regresa y extiende la mano.
-Mucho gusto, pásale carnal. Hay pocas máquinas porque me chingó el operativo, pero ahorita te explico.
Entramos a una bodega que tiene unas cuantas mesas, discos despedazados en el suelo y miles de portadas de películas bien ordenadas. Subimos unas escaleras de caracol y al final, los quemadores donde piratean las películas.
Un servidor de este tipo tiene un cerebro, siete quemadores, una fuente de poder y un ventilador para que no se caliente de más. Aquí hacen algunas de los millones de películas que se distribuyen en todo el país.
-Piratería de la chingona
Contrario a lo que puedan pensar, hacer piratería no es cosa fácil.
La película terminada que se puede encontrar en menos de tres pesos en el barrio bravo, es la conclusión de un negocio que depende del dólar casi completamente.
Una caja de discos con 600 piezas, 900 pesos.
Las portadas en 40 centavos cada una. Un ciento de bolsas 70 pesos. Un buen quemador hasta 4 mil pesos. Todo es gasto y cada quién sabe dónde comprar.
Si el dólar sube, todo sube, si el dólar baja, el pueblo disfruta.
Un buen vendedor puede gastar hasta 2 pesos por película y venderlas al mayoreo hasta en 2.80. Aún con este precio, gana desde mil 500 hasta 2 mil pesos en un lugar pequeño y hasta 20 mil al día en puesto grande.
La leyenda dice que entre más lejos llegue la película, más cara será, para muestra que en algunos lugares del Distrito se pueden conseguir en 10 o 15 pesos, por eso en Monterrey valen 50.
La garantía es que las películas “chingonas”, salen de Tepito.
-Chulo master-
La estructura es muy sencilla, los empresarios de la cinematografía venden desde mil 500 pesos un master para poder sacar una película pirata.
Si es un estreno, puede costar hasta 20 mil pesos y llegar dos meses antes de que sea exhibida.
Los compradores contratan un hacker para que quite los candados que trae la película y se pueda convertir en un master que después es vendido en 10 pesos, para los cientos de quemadores que hay en el barrio o que vienen del interior de la República.
Venden los discos “quemados” a los vendedores ambulantes y hacen negocio con “piratas foráneos” para que se lleven millares.
En una hora pueden “quemar” más de mil 600 discos, sólo basta tener, cómo dicen ellos, un chulo master.