Durante 2015 fueron 13 los uniformados que murieron en el cumplimiento de su deber.
El caso del policía Juan Campos que murió cuando laboraba en una vialidad capitalina se suma a una larga lista de uniformados que han muerto en el cumplimiento de su deber, una actividad de alto riesgo y en muchos casos poco reconocida y mal remunerada.
Ayer, en Chihuahua un policía municipal murió luego de ser embestido por un auto en el cruce de las avenidas Juárez y 49. Jorge Humberto Meléndez Lozano iba en una motocicleta cuando fue impactado por una conductora a bordo de un vehículo Metro, placas EKH7927.
De igual forma, en el Estado de México, un policía ministerial fue asesinado al intentar detener a dos presuntos delincuentes, quienes intentaron despojarlo de su automóvil.
La situación de riesgo eminente para los uniformados cobra cifras mortales cada año. Tan sólo en la Ciudad de México, la Secretaría de Seguridad Pública contabilizó 13 policías que fallecieron en el cumplimiento de su deber: cinco asesinados a balazos y los demás atropellasos o en incidentes viales.
Los uniformados enfrentan agresiones verbales, golpes, atropellos, disparos y toda clase de agresiones como consecuencia de que la figura del policía ha sido duramente atacada.
Sin embargo, las cifras de uniformados que mueren en cumplimiento de su deber c
