El 9 de septiembre, Alejandro, conductor de taxi privado, recogió a un usuario en el Aeropuerto, minutos después ambos fueron víctimas de un robo. Al vehículo le poncharon unas de las llantas para que se detuvieran.

Despúés de recoger al usuario alrededor de las 21:00 horas, Alejandro tomó la avenida Hangares para incorporarse a Circuito Interior.

El conductor observó que un vehículo Chevy circulaba delante de él y seguía sus pasos muy de cerca.

Al pasar por la Colonia Peñón de los Baños la llanta delantera izquierda se ponchó y el conductor optó por salir de los carriles centrales para orillarse y poder cambiar el neumático.

El hombre se detuvo en una gasolinera que se ubica en la esquina de la Calle Norte 178, y al revisar el neumático encontró cinco estrellas formadas con clavos.

“Son clavos soldados, con cuatro puntas afiladas que, al dejarlos caer, una punta siempre queda hacia arriba para poder ponchar la llanta”, indicó Alejandro.

No habían pasado mucho tiempo cuando un par de hombres se aproximaron al chofer y al pasajero para asaltarlos. Alejandro corrió hacia una tienda de conveniencia al mismo tiempo que activaba los seguros del carro.

Al contrario, el usuario entregó su cartera, reloj y maleta, en la que, además de objetos personales, iban documentos importantes.

Los delincuentes huyeron en un Chevy que los esperaba.

Con información de Reforma.