Historias de Atizapán : Puente el centenario y el diablo carretera Atizapán-Nicolas Romero

Escuchar Nota :
[responsivevoice_button voice="Spanish Female" buttontext="Play"]


Este puente situado a las orillas de la salida de Atizapán rumbo a Nicolás Romero. Límite natural entre el pueblo de Atizapan y la majestuosa ex hacienda de El Pedregal, construido de tres arcos en los años de 1921 y 1922, como ya lo vimos en la fotografía, este puente que se derrumbó varias veces, debido a que posiblemente su construcción era de un solo arco y debilitado por lo ancho del Río San Javier. Es un puente sirvió de comunicación entre el pueblo y tierra adentro (Jilotepec.Maravatio, Morelia etc) desde la época colonial, su construcción en un principio fue de madera, para después ser de piedra. Siendo muy ancho su caudal y muy corto su medio punto, dio lugar a que este puente sufriera constantes caídas y semiconstrucciones, se dieron a la tarea las autoridades de aquellos años, a la reconstrucción del Hoy Puente Centenario, participó don Brigido Rojas Rodríguez con dinero y empleando peones de su hacienda para la construcción del Puente.

La leyenda nos cuenta que fue contratado un empleado albañil, quien supeticioso busco la forma de perdurar el puente, debido a que siempre se caía posterior a su construcción, para esto invocó al diablo e hizo un pacto con él, con quien se entrevistó diciéndole que le ayudara a hacer el puente, pero sin que se cayera con el paso del tiempo o del agua o sin ella.

12316533_525250624300282_1439989618838176823_n

El diablo le dijo que si, pero que, que le daría a cambio, el albañil contestó que la daría su alma, pero que le urgía que se terminara rápido, para esto el “maistro” y el diablo se pusieron de acuerdo y que en determinado tiempo debería terminarse el puente en su totalidad, pusieron fecha y que tendría que ser a las 12 de la noche de determinado día. Pues bien así se hizo iniciándose la construcción del puente sin contratiempos el mismo diablo supervisaba la obra a diario, “el centenario” se veía mas fuerte desde sus cimientos, su paredones con sus tres arcos bien formados e edificados a base de ladrillo y piedra y sin temor aun cuando lloviera de que el puente cayera.

12294733_525250674300277_8010693085483621631_n

Llegó el día señalado entre el albañil y del diablo, justo antes de la media noche llegó el diablo por el alma del albañil, quien estaba cenando y muy despreocupado, vio al diablo y le dijo: “espérame un poco todavía no es la media noche” siguió cenando, llegada la media noche le dijo el “maistro”,; En que puedo servirte?, el diablo le contestó: “vengo por tu alma, así como lo prometiste”, Bueno pues llévame si puedes, dijo el albañil, pero debo decirte que ya son más de la media noche y el puente aún no está terminado, solo paré un poco de trabajar porque me dio hambre y me vine a cenar y tu prometiste- siguió diciendo el albañil- que me ayudarías a terminar el puente y nunca te apareciste. El diablo enojado por mas intentos que hacía por llevarse el alma del Maistro, no podía, pregunto el diablo que por que no se podía llevar su alma a lo que el albañil le dio como respuesta contestando; “El puente no esta terminado, tu diablo no cumpliste con tu promesa de ayudarme a terminarlo, le falta una piedra y un tabique”, al tiempo que señalaba el albañil con un dedo, a la parte superior del puente donde en la actualidad en uno de los arcos a simple vista, hace falta la piedra mencionada en la leyenda.

De esta manera el diablo no se pudo llevar el alma del albañil

Comenta con tu cuenta de Facebook