Sin contar con protocolo de seguridad y operativo organizado que garanticen la seguridad de los usuarios del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, uniformados de la Policía Bancaria e Industrial, asignados a este medio de transporte protagonizan casi todos los días enfrentamientos con vagoneros en pasillos, andenes, torniquetes e incluso en el interior de los vagones, cuyo resultado ha sido el traslado de policías a hospitales por los golpes que reciben por parte de los vendedores.
Sin importar la presencia de niños, mujeres embarazadas y personas adultas mayores, los policías de la PBI enfrentan a los vendedores, ya que la consigna de los uniformados es no permitir la presencia de estos ambulantes en el interior de este medio de transporte público.
Sin embargo, estas batallas entre policías y ambulantes ponen de manifiesto la falta de preparación, protocolos de seguridad y organización por parte de los policías, ya que en la mayoría de los enfrentamientos un número importante de policías han resultado gravemente lesionados por los golpes que les propinan los vendedores.
Luego de incrementar la tarifa del Metro de tres a cinco pesos, se destinaron cuatro mil 900 elementos de la PBI, con el objetivo de prevenir y eliminar el comercio informal en el interior y en las entradas de este medio de transporte.
Pese a ello, los esfuerzos por parte de la administración local para erradicar esta actividad ilícita en el interior del Metro han dado pocos resultados, ya que la presencia de ambulantes sigue presente en todas las Líneas que conforman este medio de transporte público.
Al tratar de remitir o consignar la mercancía que venden estas personas, los uniformados “encienden la mecha” de esos vendedores, quienes siempre andan en pareja, lo que provoca que de manera inmediata lleguen más comerciantes ilegales, que al superar a los policías en número los golpean hasta que liberan a sus compañeros detenidos y la mercancía.
Derivado de estas peleas, en ocasiones el servicio del Metro se ha tenido que suspender, ya que los enfrentamientos también se han registrado en el interior de los vagones, donde los vendedores se quitan los cinturones del pantalón, para agredir con la hebilla a los uniformados. Además de valerse de botellas y piedras, sin importar que lesionen a pasajeros.
El año pasado, la dependencia local reportó solo 15 enfrentamientos entre uniformados y vagoneros con fechas 1 de abril y 21 de abril, 13 y 14 de mayo, 30 de junio, 25, 26 y 27 de julio, 12, 14 y 18 de agosto, 5 de septiembre y 14 de noviembre. Sin embargo, usuarios de este medio de transporte evidenciaron mediante redes sociales más enfrentamientos de los registrados en bitácora por las autoridades de la administración local.
De estos registros, el enfrentamiento más violento fue el que se vivió el primero de abril, donde más de 150 vagoneros se enfrentaron a 150 uniformados en la estación del Metro Chabacano, con saldo de 15 uniformados lesionados.
Para este año, ya se registró el primer enfrentamiento entre policías y ambulantes, el pasado 21 de enero en la estación Centro Médico de la Línea 3, con saldo de dos policías y un vendedor lesionado.
Además, como resultado de estos enfrentamientos, el Metro ha registrado daños a los vidrios de las ventanas de los vagones, derivado de los golpes de los vagoneros y vidrios rotos de las vitrinas de exhibición de eventos culturales como en la Estación Balderas.