Un sujeto que cargaba 1.000 cigarrillos con droga, se llevó tremenda sorpresa cuando descubrió que estaba en un carro de Policía.

El hecho ocurrió en el barrio Ciudad Libre de Christiania, en Copenhague, donde se mueve un importante mercado de cannabis.

“Anoche un traficante de cannabis de Christiania que quería llegar rápidamente a casa se subió a un taxi. Recibió una gran sorpresa cuando se dio cuenta de que en realidad era un coche de policía en el que estaba sentado”, escribió la policía de Copenhague en su cuenta de Twitter.

El traficante portaba unos 1.000 cigarrillos, precisó la policía, que lo detuvo inmediatamente.

Aunque las autoridades inicialmente dijeron que el hombre sería multado, un tweet posterior sugirió que podría pasar tiempo en la cárcel.

Anteriormente un área utilizada por las fuerzas militares danesas, Christiania fue establecida originalmente por ocupantes ilegales en 1971.