El presidente estadounidense, Donald Trump, firmó este martes una orden ejecutiva para proteger al país de ataques de pulso electromagnético (EMP), considerados potencialmente peligrosos para infraestructura crítica como la red eléctrica.
El decreto de Trump ordena a las agencias federales identificar las amenazas planteadas por estos ataques militares de EMP, que destruyen total o parcialmente el equipamiento eléctrico y electrónico dentro de su radio de acción.
En una conferencia de prensa telefónica, altos funcionarios del Gobierno explicaron que la orden hará que diferentes departamentos “coordinen la evaluación de las amenazas que plantean los EMP y que encuentren formas de prevenir su impacto”.
La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, señaló que la nueva normativa creará un ambiente “que promueva la innovación del sector privado para fortalecer una infraestructura crítica”.
“La orden ejecutiva, la primera en establecer una política integral para mejorar la resistencia a los EMP, es un ejemplo más de cómo el Gobierno mantiene su promesa de estar siempre alerta contra los peligros actuales y las amenazas futuras”, apuntó Sanders en un comunicado.
Los funcionarios señalaron que la estrategia del Departamento de Seguridad Nacional lanzada en 2017 fue la primera en identificar a los EMP como una amenaza, y que la orden ejecutiva se basará en ese trabajo.
“Estamos tomando medidas concretas para hacer frente a esta amenaza”, aseveró uno de los altos funcionarios.
De acuerdo a la directiva, la secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, tiene 90 días para crear una lista de sistemas esenciales de la nación que, si se interrumpen, podrían causar daños a la seguridad pública, y un año para identificar la infraestructura básica que podría verse afectada por los EMP.
Los secretarios de Seguridad Nacional, Defensa y Energía también deberán enviar un informe anual a Trump sobre la mejor manera de hacer que la infraestructura sea resistente a esos ataques.
La directriz también involucra al Departamento de Comercio y a la Oficina del Director de Inteligencia Nacional en otros de sus puntos.
“Estamos tomando medidas con respecto a las recomendaciones de la comunidad científica y reconocemos que tenemos que trabajar con nuestros socios para asegurarnos de que tenemos un enfoque basado en el riesgo que contrarreste la amenaza”, puntualizaron.