Ventajas inesperadas de usar cuchillos más afilados

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cuchillos

A medida que los chefs y cocineros caseros comienzan a prestar más atención a sus cuchillos, es más evidente que la calidad de la herramienta que utilizas importa tanto como cualquier ingrediente.

Jacqueline Blanchard y Brandt Cox, los cocineros detrás de la tienda de cuchillos Coutelier de Nueva Orleans, dijeron que este cambio viene de tiempo atrás. Tanto Blanchard como Cox (que han trabajado en algunas de las cocinas más importantes de Estados Unidos), asistieron a prestigiosas escuelas culinarias, pero no se les enseñó nada sobre cómo cuidar o afilar sus cuchillos. Recientemente eso ha empezado a cambiar.

En Coutelier, su misión no es solo vender cuchillos japoneses de excelente calidad, sino también educar a sus consumidores sobre la importancia de los cuchillos de calidad.

Estudia cómo cuidar adecuadamente tus cuchillos, mira estos tres beneficios de mantener tus cuchillos bien afilados:

Es más saludable para ti

Si estás utilizando un cuchillo sin filo cortando hierbas, es posible que observes algunas manchas verdes en la tabla de cortar y en la cuchilla, esto es resultado de un desperdicio de excelentes nutrientes.

“Si dañas menos la comida y quedan menos residuos en tu cuchillo y en la tabla de cortar, los nutrientes entran directo a tu cuerpo”, dice Cox.

Entonces, cuanto más afilado sea el cuchillo, más nutrientes quedarán en la comida que terminará llegando a tu boca.

Lloras menos

Por ejemplo, un cuchillo filoso atraviesa una cebolla sin hacer que esta se desjugue, lo que ayuda a minimizar el gas que causa el lagrimeo cuando se rompen las paredes celulares de los sulfóxidos.

“Hay muchas historias del por qué lloras”, dice Blanchard. “Pero cuando usas un cuchillo más afilado, literalmente daña menos la estructura celular en esa cebolla, y se pierde menos jugo”.

Cocinas más

Tanto Blanchard como Cox creen firmemente que la transición a cuchillos más afilados y de mayor calidad hace que cocinar se sienta menos como una tarea difícil o una lucha. Y puede haber momentos en los que digas ¡vaya, esa berenjena se cortó tan rápido y sin esfuerzo!

“Una vez que sabes que tu cuchillo está afilado y que no va a ser una tarea difícil, se vuelve mucho más agradable y tienes la alegría de cortar algo sin tanto esfuerzo”, dice Blanchard. “Devuelve la alegría a la cocina”.

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