En muchos casos, estos enlaces se dan debido a la pobreza, ya que las familias se libran de tener que mantener a un miembro más. Unido a esto, leyes religiosas sostienen estos enlaces.
Una organización sin fines de lucro en el Líbano, decidió realizar un video donde simulaba una boda entre una niña de 12 años y un hombre de 41 con el fin de concientizar a las personas sobres los matrimonios arreglados donde regularmente se ven implicados menores de edad.
En la grabación se muestra un malecón con vista al mar Mediterráneo. Las personas caminan y observan el paisaje buscando llenarse de frescura y libertad.
Pero hay una escena que rompe con la paz en este espacio de Beirut que han popularizado decenas de parejas de novios. La mujer vestida de blanco y su pareja con traje negro y corbata, posan para un fotógrafo. No habría problema si no fuera por un detalle: ella tiene 12 años y el 41.
Al presenciar la escena decenas de turistas que pasean por el lugar reaccionan ante la situación. “¿Es tuya?”, pregunta un transeúnte. “Sí, es mi esposa”, contesta el novio. “Felicidades”, replica otro.
Sin embargo algunas personas no toleran lo que ven. “Eres como su abuelo”, plantea uno. “Eso no es asunto tuyo” responde el hombre. “Una palabra más y te lanzo al mar”, contesta el otro espectador.
Con el paso de los minutos cada vez más personas comienzan a juntarse alrededor de la “pareja” y se aprecia cómo una mujer enfadada cuestiona a la menor: “¿Dónde están tus padres? ¿Dónde está tu madre?”. Cuando el hombre responde, nuevamente, que no es asunto suyo, ésta indica: “¡Claro que es asunto mío! ¡Sólo tiene 12 años! Yo estaba trotando, pero me quedé congelada cuando la vi”.
“La ley lo permite”, plantea el hombre.
Afortunadamente, el caso anterior es una dramatización orquestada por la organización sin fines de lucro Kafa (que en español quiere decir “Basta”), para concientizar sobre matrimonios arreglados que implican a menores en ese país.
En muchos casos, estos enlaces se dan debido a la pobreza, ya que las familias se libran de tener que mantener a un miembro más. Unido a esto, leyes religiosas sostienen estos enlaces. Sin embargo, las niñas se exponen a abusos físicos y emocionales, y a embarazos riesgosos, de acuerdo con la Unicef.
Una nueva ley redactada el año pasado busca reducir este tipo de uniones, estableciendo que un juez civil y no solo tribunales religiosos, deben consentir estos matrimonios. Sin embargo, el estatuto no ha sido aprobado
Fuente : Sin Embargo