Guatemala.- Oscar Ordoñez López de 11 años salió de su casa en aldea Palajachuj del municipio de San Sebastián, Huehuetenango.
Sin desayunar y sin almorzar, a media tarde y con el estómago vacío se acercó al mercado de la terminal de Huehuetenango en la zona 5 donde tomó un plato de comida para saciar su necesidad, eso le valió que un grupo de personas adultas, identificados como “patrulleros de la terminal” lo vapulearan acusándolo de ladrón.
“Tenía hambre y en mi casa no hay ni tortillas con sal” dijo entre sollozos.
Cuando encontraron al pequeño Oscar un grupo de señoras lo ayudó.
Varias personas exigen la intervención de la Procuraduría de Derechos Humanos para castigar a los desalmados.A pero no sean hondurenos de la carabana asta alcohol les dan y servicio medico