Especialistas indicaron que para resolver los problemas de contaminación y basura, el Gobierno estatal y el de la Ciudad de México deben buscar coordinarse.
En una mesa de análisis “Retos de las Megalópolis: calidad de aire, energía, movilidad”, realizada en el Parque Ecológico Xochitla, el Nobel de Química Mario Molina hizo este señalamiento.
“De los ejemplos muy claros de cosas que hay que arreglar, es que están desconectados los servicios de transporte público del Estado de México con la Ciudad de México, entonces lo ideal es coordinar”, dijo.
Molina indicó que la importancia radica en que las personas deben trasladarse grandes distancias para acudir a su trabajo.
Dijo que sólo el 50 por ciento de la población de bajos recursos vive cerca de una ruta de transporte público.
Por lo que entre las acciones que propuso fue crear políticas de movilidad vinculadas a mejorar la calidad del aire y la salud de la población y realizar estudios para promover la eficiencia energética en edificaciones.
También señaló la importancia de que ambos territorios impulsen la creación de ecozonas, es decir, restringir el paso a vehículos altamente contaminantes, reordenar y modernizar el transporte público, así como promover la movilidad no motorizada, como calles peatonales y sistemas de bicicleta pública.
Pidió involucrar a la ciudadanía en proyectos y fomentar la separación de basura.
“Sí se puede, pero pues es algo que toma tiempo y tenemos que hacerlo de esa manera, con creatividad, dándole lugar a todo mundo y tratando de evitar que las cosas se resuelvan nada más a periodicazos”, dijo.
En tanto, Roberto Eibenschutz, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana, insistió en que llegar a un acuerdo es una obligación como gobierno, para ofrecer mejores condiciones de vida a la población.
“Tanto el Gobierno de la Ciudad de México, como el del Estado México tienen razón, uno le echa la basura al otro, y el otro le echa los gases, es cierto, esos son los temas metropolitanos, y por eso hay que sentarse a la mesa y discutir los temas metropolitanos y ponerse de acuerdo”, consideró.
“Ahora con la nueva legislación ya no es una cuestión que haya que dirimir en términos de si estamos de acuerdo o no, es una obligación sentarse a la mesa y enfrentar estos problemas y establecer una estrategia común que permita darles la mejor solución posible”.
Finalmente, Alfonso Iracheta, doctor en geografía y estudios regionales por la Universidad de Varsovia y profesor del Colegio Mexiquense, reiteró la importancia de la participación ciudadana, y señaló la poca importancia que los gobiernos han dado en ello.
“No hay ninguna institución de interlocución en México para la participación social y menos en el tema urbano”, dijo.
Fuente : Reforma
