Analistas y partidos se pronunciaron por la necesidad de que la elección en el Estado de México, cuyo padrón es de más de 11 millones de ciudadanos y donde se espera la instalación de más de 21 mil casillas, cuente también con la mayor cantidad de observadores ciudadanos.
“Al menos debe haber 125, uno por cada municipio; o 45, uno por cada distrito local, pero lo sustantivo es que hubiera uno por cada casilla”, dijo a principios de mes Octavio Martínez Vargas, secretario electoral del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
“El Estado de México tiene que dejar de ser cuna de la trampa electoral, donde se ha incubado toda la estrategia conocida como carrusel, el mapachismo, toda la marea roja, que no es otra cosa que movilizadores, mercaderes del voto […]. Será fundamental la participación ciudadana para que se haga valer la decisión libre y secreta”, agregó por separado Jorge López Martín, vocero de los diputados federales del Partido Acción Nacional (PAN).
A 12 días de que se cierre el plazo –30 de abril– para la recepción de solicitudes para el trabajo de observación en el próximo 4 de junio, el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) reporta haber recibido sólo 15 peticiones en cinco meses.
El IEEM desglosa que las 15 peticiones son para sólo seis de los 45 distritos electorales, por lo que, hasta este momento, hay 39 demarcaciones electorales para las que no se han registrado peticiones ciudadanas de observación de la jornada que se considera, por el número de votantes, la más importante a realizarse este 2017.
Todo parece ser que la gente ha perdido el interés de participar en el juego de las elecciones y sobre todo esto indica que el abstencionismo prevalecerá y la credibilidad de las instancias electorales está perdiéndose.