Ciudad de México.- El sexenio de la camarilla del llamado ‘Nuevo PRI’ y del Presidente Enrique Peña Nieto será recordado por los historiadores, como el que más laceró a la economía del país y la que más desfalcó las arcas de los estados.
22 gobernadores del PRI y su voracidad ilimitada han desviado más de 258 mil millones de pesos.
Un reportaje especial del portal de noticias Sin Embargo nos muestra cuanto en verdad han desviado los mandatarios priistas en estos seis años del ‘copetes’.
De los 32 gobernadores que han administrado sus respectivas entidades al paralelo de la administración de Enrique Peña Nieto, son 22 los priistas que han desviado más de 258 mil 929 millones 185 mil pesos de las arcas públicas; así se puede constatar según denuncias penales y resultados que demuestra la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
Hasta el momento solamente 5 han sido detenidos y tienen orden de aprehensión y 4 han sido denunciados ante la Procuraduría General de la República (PGR).
Los más atracadores en la lista son el ex gobernador de Chihuahua, César Duarte Jáquez (2010-2016) y por supuesto el ex mandatario de Veracruz, el criminal y hoy detenido en Guatemala, Javier Duarte de Ochoa (2010-2016).
Los primeros en la lista
Entre el 7 de julio de 2012 y el 14 de octubre de 2014, la Secretaría de Hacienda en Chihuahua realizó 342 depósitos que sumaron 80 mil millones de pesos, de fondos públicos a la Unión de Crédito Progreso, banco del que César Duarte es socio.
En un solo día, el 2 de diciembre de 2013, el Gobierno de Chihuahua depositó al banco mil 208 millones de pesos. Durante su administración, el estado se endeudó en un 284 por ciento, al pasar de 12 mil 574 millones a 55 mil millones de pesos.
Por su parte, Javier Duarte de Ochoa, es señalado por delincuencia organizada, desvío de recursos y por encabezar una red de corrupción luego de ser capturado tras 186 días de huida. La ASF documentó un manejo irregular de 35 mil millones de pesos en la administración veracruzana.
La lista negra sigue
Después del mandatario de Veracruz, sigue el actual gobernador de Coahuila, Rubén Moreira Valdez, quien fue señalado en abril pasado ante la PGR de haber desviado 32 mil millones de pesos durante su administración y la de su hermano, Humberto Moreira. En septiembre de 2016, la bancada de Acción Nacional en Coahuila también denunció penalmente a Rubén Moreira por el presunto desvío de 160 millones de pesos a empresas fantasma.
El indigno cuarto lugar pertenece a Aristóteles Sandoval Díaz, gobernador de Jalisco desde el año 2013. En su caso, la Auditoría Superior de la Federación lo llamó a aclarar el uso de 17 mil 500 millones de pesos de 2011 a 2015.
En el quinto sitio llega el gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas, quien debería comenzar a rendir cuentas para aclarar el destino de 3 mil 603 millones de pesos que recibió a través de fondos y programas federales durante el 2015.
